La Plaza Wenceslao es uno de los polos capitales de la anatomía urbana de Praga. En realidad, no es una plaza sino una gran alameda en lo que es el Barrio Nuevo de la ciudad, bautizada así en nombre de San Wenceslao, Santo Patrón de Bohemia.
Inicialmente conocida como el Konsky trh (el Mercado de los Caballos) en la época medieval, hoy tiene unas 7 cuadras de largo y corre en dirección Sureste-Noreste. A consecuencia de este trazado, con tal de obtener buenos resultados fotográficos, es mejor visitarla sobre el meridiano.
La gran avenida está dominada mayormente por edificios de estilo neo-clásico —aunque también de otros—, con lo mejor de la arquitectura de Praga, y en uno de sus extremos está enclavado el Museo Nacional Checo. Pero estilísticamente hablando, nuestro inmueble favorito es el hermoso Grand Hotel Evropa.
Para llegar a la Plaza Wenceslao, viniendo no de los alrededores, se puede abordar la Línea A del Metro y bajar en la estación Muzeum, una bien ocupada en lo que a pasajeros respecta.