EMILIO LEZCANO y un Jaguar E-Type de 1963 corren juntos en Sebring

por PEPE FORTE. Fotos del autor y de Jaguar

El corredor obtiene decorosa posición al volante de un clásico en la carrera tipo "vintage" en afamado autódromo.

El periodista y piloto de carreras Emilio Lezcano, se alzó el viernes 18 de marzo del 2005 con un decoroso 7mo. Lugar entre 48 bólidos participantes en la carrera Vintage de Sebring. Lezcano corrió a bordo de un Jaguar E-Type de 1963 marcado con el No. 63 —no es pura coincidencia, sino todo lo contrario— en el complejo de carreras Sebring International Raceway en la ciudad homónima, en el estado de la Florida, a unas 100 millas al Noroeste de Miami, en los EEUU. El hecho marcó además el envidiable hito de haber sido el único hispano invitado a participar en el importante evento.
  
   Lo mismo el piloto que el coche, corrieron juntos por segunda vez y, sin duda, representan un binomio de éxito. El vehículo pertenece al Jaguar Select Edition/Donovan Motor Cars. Se trata de un belicoso bólido de 4.2 litros y 4 velocidades manuales, capaz de generar 415hp y al que su conductor llegó sacarle unas 175 mph en la difícil pista de Sebring.
  
   "Fue para mí un gran honor que Jaguar y Donovan me invitaran a participar en la carrera, especialmente al volante del 63, que es una máquina antológica. Y qué satisfacción que haya sido un hispano quien lo hiciera", comentó Lezcano.
  
   Pero no sólo satisfacción, sino también una verdadera responsabilidad. Lezcano, a quien se le podría bautizar con el epíteto de "El Caballero de la Pista", sacrificó unas cuatro posiciones con tal de preservar la integridad física de este vehículo en su doble personalidad de Dr. Jekill and Mr. Hyde, pues el coche no sólo compite, sino que es un habitual de salones de exhibición por su impecable estado de conservación. De modo que un piloto responsable como Lezcano lo corre para ganar, pero con todo el cuidado cual si su carrocería fuese de Baccarat. Lezcano explica:
  
   "Tengo la responsabilidad de hacer quedar bien con mi participación a quienes ponen en mis manos esta joya, pero a la vez tengo también la gran responsabilidad de cuidar el estado físico de ese auto tan preciado. En esta misma carrera de Sebring, de haber corrido más agresivamente, sin duda habría adelantado unas tres posiciones más".".

De fino vestir y vasta cultura, conocedor de mundo y medio más que de medio mundo, periodista y músico, pocos podrían adivinar que este hombre de hablar pausado y lenguaje corporal que parece heredero de la más rancia etiqueta real británica, lleva en el alma una gran pasión por los automóviles y la velocidad.

"Correr en Sebring bajo la bandera de SVRA es como correr en un museo vivo y al aire libre. Me siento muy contento por la posición obtenida por el equipo. En la última vuelta, de las 12 que contempla la carrera, pude rebasar a dos carros en la curva 17, a pocos metros de la meta", nos comentó Lezcano.

 

SVRA es la sigla de Sportscar Vintage Racing Association, importante entidad que se ocupa de esta atractiva modalidad de competición.

La carrera, que duró 29 minutos, sirvió para celebrar el 50 aniversario del primer triunfo de Jaguar en 1955, con un D-Type pilotado por Mike Hawthorne y Phill Walter. Lezcano clasificó 22 en la largada eliminatoria de 61 vehículos y terminó séptimo en su división (la de los 'grandes'). En esta reciente edición de SVRA fue precisamente otro Jaguar, un XKE de 1962, pilotado por Scot Cline, el que se llevó el 1mer. Lugar.
  
   Esta competencia es atractiva como pocas. Corren autos "del pasado" —de ahí lo de vintage— y que integran una curiosa nómina en la que se encuentran, entre otros, Corvettes y Mustangs de los años 60, y hasta Morris, Coopers y Saabs de la misma época. Venerables vehículos en excelente punto de rendimiento y que, salvando las distancias, son capaces de velocidades y tiempos que nada tienen que envidiar a lo mejor de la más contemporánea técnica de competiciones.
   
  

La pista de Sebring, de celebridad universal, y una de las más difíciles del mundo, tiene una extensión de 3.7 millas y 17 curvas, y desde 1952 se corren allí las famosas 12 Horas de Sebring. Especialmente la curva No. 7, bautizada Hair Spin, que con sus 45º de ángulo, le pone los pelos de punta no sólo a los corredores, sino a los espectadores.
  
   Otros particulares decoran el inventario de éxitos de Lezcano. Lezcano corre Formula Ford, Formula Dodge, Open Wheel, y en el año 2002 obtuvo el Tercer Lugar en la competencia de Rally —a campo traviesa— en el severo circuíto de Ojibwe Forest, en Minnesota, como miembro del Hyundai Rally Team USA, gobernando un Hyundai Tiburon. Igualmente en esa ocasión, fue el único hispano invitado a participar del evento.
  

Lezcano, que corre desde 1986, es además cronista de viajes y periodista de automovilismo. Desde muy joven fue reportero de automovilismo deportivo y es un gran conocedor de la historia de este deporte. Con frecuencia es invitado a los medios del aire a hablar de sus experiencias. Nació en Cuba y hace más de 30 años se exilió en Estados Unidos. Lezcano es vecino del Sur de la Florida.

Tras la carrera, el campeón tiene ánimos y tiempo para bromear al volante de un carro de golf.
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