Entrevista: Pepe Forte

Publicada en MUNDO DEL DISCO/Diciembre 2002

Carlos Ponce abre la entrevista bromeando acerca de que el primer promocional de su disco “Ponce”, cuyo estribillo repite a mí me gusta la mujer con pantalones, “está dando una imagen equivocada de mí”. Y se echa a reír. Y, siguiendo en esa línea de las falsas apreciaciones, comenta:

—Precisamente los dos primeros singles no reflejan el verdadero disco, que es muy acústico, muy roquero, y ésa no es la impresión que dan “Mujer con Pantalones” y “Concebido sin Pecado”. Esos dos primeros cortes te hacen pensar que se trata de un disco distinto.

¿Por qué?, indagamos.

—Es que, mira, “Mujer con Pantalones” la escribió Nicolás Tovar, que es barranquillero, y ya eso te explica ese tono folk, de vallenato, de la canción. Y “Concebido sin Pecado”, que es una canción difícil por cuanto era para la telenovela y era una canción por receta que tenía que decir amor, ternura... pero para mí, aunque son dos temas excelentes, no son el disco.

Hay una razón por la cual “Concebido sin Pecado”, tema de la telenovela “Sin Pecado Concebido”, de la que el propio Ponce fue protagonista, no fue el primer corte del disco. El artista explica:

—Se decidió que en aquel momento en que se televisaba la novela —revela Carlos—, no se promoviera el tema como single, ya que por estar en la serie se promovía sola. Por eso se escogió como primer promocional a “Mujer con Pantalones”. Y, por cierto, respecto de pecado... tuve que invertir el título, fue una estrategia, porque tenía que decir sin pecado concebido, que es el título de la telenovela, pero me sonaba muy difícil de manejar como frase musical y entonces la cambié a “Concebido sin Pecado”, que es más lógica.

Carlos continúa desmenuzando el disco:

—Quitando “Ahora o Nunca”, y “Jabón”, el resto de las canciones son mías. “Mía” es una derivación de aquel tema de Julio Iglesias “Lo Mejor de tu Vida”, que habla de la entrega de una muchacha la primera vez. Me parece un asunto muy bello, y lo hice para que la muchacha siempre tenga un tema así para recordar ese momento único. Y “Nalgadas de Sabina” es un sueño que yo tuve con Joaquín Sabina en el que él me empieza a dar unos consejos musicales. Es una canción muy simpática, y lo de ‘nalgada’ es una metáfora, porque me refiero a lo que me dice Sabina, que está entre el consejo y el regaño.

A propósito de “Nalgadas...” Ponce, que es aterradoramente franco —él lo sabe—, dice cosas que otro artista no se atrevería a decir:

—Mira, podría decirte que “Nalgadas...” es como mi canción de protesta, medio disfrazadita, de cómo funciona este negocio, de las presiones comerciales, etc... yo, que no soy muy político, ni muy reservado, tenía una espinita clavada, y te digo que el mejor ejemplo de que esa opinión funciona es que mi compañía discográfica me ha permitido incluir la canción en el disco cuando tiene una frase que dice, si tu disquera quiere un tema comercial, que prenda la televisión. Yo pensaba que me la iban a sacar, pero no. Yo, lo que no puedo es quedarme callado. Mira, por ejemplo, creo que hacer un disco basado en las demográficas es un error. Yo lo que soy es diplomático; de otras gentes yo no hablo mal, pero de mí y de mis cosas sí, y por eso yo le digo a mi gerente que yo no voy a sonreír ni a darle la cara a una cosa con la que me siento mal.

El disco del Stop o el Go
“Ponce” es el tercer disco de Carlos Ponce, un número ordinal que en este negocio él cree decisivo:

—El tercer disco de un artista es definitorio, es el disco que te dice que la carrera se acabó aquí o no. Hay a quien se le acaba en el primero, pero me he puesto a estudiar la carrera de otros y he visto que es un disco de evolución de cualquier artista.

Y para Carlos, el tercero significa que va a seguir, porque...

—Ya tengo mucho material para el cuarto disco, incluso cosas del primero que no incluí...

 
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